La Propiedad Horizontal, también conocida como régimen de condominio, es una forma de organización que regula la convivencia en edificios o conjuntos residenciales donde coexisten diferentes residentes. Con el fin de mantener el orden y la armonía en estos espacios compartidos, se establecen sanciones y medidas disciplinarias para aquellos residentes que infrinjan las normas establecidas. Sin embargo, surge el debate sobre si estas acciones son justas o representan un exceso de poder por parte de las administraciones de la Propiedad Horizontal.
Para entender ambos puntos de vista es necesario analizarlos en profundidad para encontrar un equilibrio adecuado.
Por una parte se encuentran las sanciones y medidas disciplinarias en la propiedad horizontal que tienen como objetivo mantener la convivencia pacífica y garantizar el respeto de los derechos de todos los propietarios y residentes. Estas acciones se encuentran generalmente estipuladas en el reglamento interno de la PH y su aplicación dependerá de todo lo estipulado en la Ley 675 de propiedad Horizontal y adicionalmente lo establecido en el manual de convivencia.
Las sanciones pueden incluir multas económicas, amonestaciones verbales o escritas, restricciones en el uso de áreas comunes, e incluso la suspensión temporal o permanente de determinados servicios o beneficios. Estas medidas se aplican en casos de incumplimiento de normas como ruidos excesivos, uso indebido de instalaciones comunes, alteración del orden, falta de pago de cuotas o daños a la propiedad.
Desde la perspectiva de los residentes que defienden las sanciones y medidas disciplinarias en la propiedad horizontal, argumentan que son necesarias para mantener la convivencia pacífica y preservar el valor de las propiedades. Estas acciones buscan establecer un marco de respeto mutuo, donde se salvaguarden los derechos y deberes de cada propietario y/o residente.
La imposición de sanciones proporciona una herramienta legal y reguladora para corregir conductas inapropiadas y prevenir situaciones conflictivas. Además, estas medidas pueden ser una forma de proteger la calidad de vida de los residentes, evitando que unos pocos afecten negativamente a la comunidad en su copropiedad..
Por otro lado, existen residentes quienes argumentan en contra de las sanciones y medidas disciplinarias en la propiedad horizontal y señalan que existe el riesgo de que se conviertan en un exceso de poder por parte de las administraciones. En ocasiones, estas entidades pueden tomar decisiones arbitrarias o sesgadas, aplicando sanciones de manera injusta o desproporcionada.
Además, se plantea que las sanciones económicas pueden afectar de manera desproporcionada a algunos propietarios y/o residentes, especialmente a aquellos con menor capacidad adquisitiva. Esto podría generar inequidades y dificultades financieras para algunos, lo cual resulta cuestionable desde el punto de vista de la justicia social.
… ¿Y si buscamos un equilibrio adecuado?
Es importante encontrar un equilibrio adecuado entre la necesidad de establecer sanciones y medidas disciplinarias para preservar la convivencia y evitar abusos de poder. Para lograr esto, es fundamental contar con reglamentos claros y transparentes, que especifiquen claramente las normas y las consecuencias en caso de incumplimiento.
De igual forma, es necesario establecer mecanismos de control y supervisión para garantizar que las sanciones se apliquen de manera justa y proporcionada. Los residentes deben tener la posibilidad de presentar reclamaciones o apelaciones en caso de considerar que se han cometido injusticias, teniendo en cuenta que estas acciones deben realizarlas mediante PQRS a la administración.
Recuerda que si deseas llevar un control y seguimiento de PQRS de tu PH, puedes implementar plataformas administrativas que facilitan el proceso de registro para los residentes, así como la ejecución a la administración.
Si te interesa conocer leer sobre plataformas administrativas te recomiendo los siguientes artículos:
Ventajas de gestionar la PQRS de tu Propiedad Horizontal mediante plataformas administrativas. Leer aquí.
5 beneficios de contar con una plataforma administrativa en la propiedad horizontal. Leer aquí.
Además, se puede promover la mediación y el diálogo como alternativas a las sanciones, fomentando la resolución pacífica de conflictos y la construcción de consensos entre los propietarios y/o residentes. Estas acciones pueden contribuir a crear un ambiente de convivencia más armonioso y solidario.
Para finalizar, de parte de Propiedata somos partícipes de que el establecimiento de reglamentos claros, mecanismos de control y supervisión, así como la promoción de la mediación, son aspectos fundamentales para garantizar que las sanciones en la propiedad horizontal sean justas y proporcionales. De esta manera, se podrá alcanzar un equilibrio adecuado entre la necesidad de mantener el orden y el respeto a los derechos individuales de cada residente.
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